· Visita al espacio y primer contacto con el cliente.
· Análisis conceptual basado en objetivos y limitaciones.
· Evaluación estructural y descomposición del espacio existente.
· Elaboración de un presupuesto inicial estimativo.
· Reajuste de la propuesta conforme a las directrices del cliente.
· Descripción y presupuesto detallado del trabajo a realizar por cada oficio: construcción, electricidad, fontanería, pintura, carpintería, etc.
· Coordinación del calendario de trabajo y de sus participantes.
· Gestión y supervisión del proceso ejecutivo del proyecto.